COMUNICADO DE PRENSA DE LA
DIOCESIS DE SANTA CRUZ DEL QUICHE

El buen pastor da la vida por sus ovejas
(Juan 10,11)

Biografía de Monseñor Gerardi

Página principal

La diócesis de Santa Cruz del Quiché está profundamente conmovida por el asesinato de Mons. Juan Gerardi Conedera, acaecido el día de ayer en la noche, en la parroquia de San Sebastián, Guatemala.

Mons. Juan Gerardi, era actualmente obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Guatemala, coordinador general de la Oficina de Derechos Humanos, miembro del Consejo Consultivo del Proyecto interdiocesano de la Recuperación de la Memoria Histórica (REMHI). Fue el tercer obispo de esta diócesis de la que tomó posesión el 8 de diciembre de 1974 y ejerció su ministerio hasta el 20 de julio de 1980, fecha en que se cerró temporalmente esta diócesis, a consecuencia de la persecución y muerte de varios agentes de pastoral, sacerdotes y catequistas.

Tememos que pueda vincularse esta muerte con el trabajo de Monseñor Gerardi sobre el tema de los Derechos Humanos, la realización y reciente entrega del Informe del Proyecto Interdiocesano de la Recuperación de la Memoria Histórica, realizada el viernes recién pasado, 24 de abril, en la catedral de Guatemala. Por lo cual, condenamos este nuevo hecho de sangre y pedimos encarecidamente al Gobierno de la República, su inmediato esclarecimiento.

Nos solidarizamos estrechamente con el dolor de nuestro hermano Mons. Próspero Penados del Barrio, Arzobispo Primado de Guatemala, sus Obispos Auxiliares y toda la Arquidiócesis; con la familia de Mons. Juan Gerardi, y con los miembros de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado y el Proyecto REMHI.

Pedimos a todos los feligreses de la diócesis de Santa Cruz del Quiché unirse en oración por quien fue Pastor de esta diócesis en uno de los momentos más difíciles de la historia reciente. Y a los agentes de pastoral, especialmente a los sacerdotes y religiosas, ofrecer oraciones con sus comunidades por Mons. Juan Gerardi, especialmente el próximo domingo del Buen Pastor, dado que Mons. Gerardi ha seguido a Jesús, Buen Pastor, que dio su vida por sus ovejas.

Ante su muerte que nos llena de tristeza y dolor, nos queda el testimonio de la vida de un hombre y Obispo que supo seguir a Jesús hasta las últimas consecuencias. Su asesinato quisiera ser una manera de acallar la verdad sobre el conflicto armado interno en Guatemala. Su sangre, como la de tantos mártires, clama al cielo, y debe abonar la paz de Guatemala.


Santa Cruz del Quiché, abril 27 de 1998.


Biografía de Monseñor Gerardi

Página principal