Semana del lunes 3 al sábado 8 de noviembre del 2008.

Los seminaristas de la Arquidiócesis de los Altos con gran alegría nos encontramos durante una semana con el pastor de nuestra Iglesia particular: Mons. Oscar Julio Vián, y algunos sacerdotes que compartieron su experiencia con nosotros:

P. Juan Antonio Molina quien nos acompañó durante toda la semana.
Mons. Rodolfo Colominas quien compartió la historia de nuestra Arquidiócesis.
P. Carlos Ibáñez quien compartió lo referente a la administración parroquial y algunas anécdotas de su experiencia como sacerdote.
Mons. Ramón Estrada quien con su presencia nos animó en el camino vocacional.

El programa que se desarrolló durante la semana tuvo como objetivo:

Incrementar la relación personal consigo mismo, con los otros, con la Iglesia Arquidiocesana, y con el Arzobispo, para que conociendo nuestra realidad personal y nuestra Iglesia, lleguemos a ser mejores personas humanas, y en el futuro Presbíteros íntegros al servicio de todos.

La temática que se llevó a cabo contempló:
- Intervención de Mons. Oscar Julio Vián, sobre aspectos litúrgicos y aspectos humano – espirituales del Presbítero.
- P. Juan Antonio Molina compartió los puntos básicos para la catequesis y la pastoral; además trató el tema del conocimiento de sí mismo: valores y límites.
- Mons. Rodolfo Colominas intervino sobre la Historia de la Arquidiócesis de los Altos.
- P. Carlos Ibáñez compartió con nosotros el tema de la administración parroquial.

Entre las actividades más sobresalientes podemos mencionar:
- El compartir del año académico 2008 de modo fraterno y constructivo.
- Las celebraciones Eucarísticas debidamente preparadas y vivenciadas.
- Un vídeo sobre los mártires de Guatemala.
- Lectio Divina.
- Excursión a las playas del puerto de Champerico.
- Visita a la aldea de Patachaj, San Cristóbal Totonicapán, en ocasión de las confirmaciones.
- Visita al Hogar del Niño minusválido, de la Zona 4 de Quetzaltenango.

En conclusión, fue una semana de verdadera convivencia, conocimiento de nuestros valores y limitaciones, y sobre todo de fraternidad y diálogo con nuestro Arzobispo. Agradecemos a Mons. Oscar Julio Vián, su tiempo y disponibilidad. Ojalá esta semana de convivencia se siga realizando y mejorando cada año.